La aventura de ser docente.
En mi opinión la aventura de ser maestro transcurre a través de múltiples vicisitudes que el docente tiene que ser capaz de sortear implicando todos sus recursos psicopedagógicos.
Ser docente no es una cuestión innata, es un sentido, una identidad que se tiene que construir con el paso del tiempo y a la luz de lo empírico. Comparto plenamente la visión de Esteve cuando nos comenta que “… se aprende a ser profesor por ensayo y por error…”
La lectura obliga a repensar sobre nuestros inicios en la educación, que a todas luces, se da por diversas circunstancias - todas ellas validas claro está -, excepto, por una auténtica vocación. Opino que para poder adquirir una identidad real como docente, debemos derrumbar, primero, el mito de que estamos en esto por auténtica vocación. Si es así, entonces ¿por qué desde un inicio no nos preparamos profesionalmente en pedagogía?, ¿Por qué no provenimos al menos de escuelas de educación normal o normal superior? Que, a pesar de no corresponder al nivel educativo en el que estamos inmersos, guardaría más relación por lo menos.
Por lo pronto, reflexiono puntualmente sobre varios aspectos, como el hecho de lo difícil que resulta reconvertir lo que sabes para hacerlo accesible a nuestros estudiantes, a su nivel de conocimiento y bajo su propio discurso; entender que no estoy en la universidad y que tampoco son estudiantes de mi especialidad a quienes trato de enseñar.
Me ayudó a recordar la importancia de ser empático con nuestros estudiantes, atender a sus cuestiones actitudinales y conductuales, pero también a las nuestras, porque por ahí también pasa la adquisición del conocimiento y la construcción de valores; reafirma mi necesidad de formarme concienzudamente en términos pedagógicos, porque al irme adentrando en esto, al cuestionar mi identidad como docente, me encuentro atrapado en la ironía socrática “…sólo sé que nada sé…”, y que además puedo reconocer que entre más conozco, más ignorante soy.
Hasta pronto. Un abrazo para todos.
Mi confrontación con la docencia
Mi labor en el Cetmar, por supuesto que me ha resultado difícil en algunos aspectos específicos que comentaré en el curso de estas líneas, pero a la vez cuenta con momentos y situaciones muy satisfactorios y dignos de mencionar. Los contenidos temáticos de la materia de “CTSyV II” guardan mucha relación con mi profesión de origen por lo que no se me dificulta mucho el manejo de los mismos, sin embargo, no es lo mismo capacitar soldados o gente universitaria, que estar frente a un grupo de adolescentes indisciplinados, apáticos y a los cuales no puedes exigirles tampoco como universitarios.
El trabajo clínico que desarrollo cotidianamente con los muchachos del plantel, me ha proporcionado elementos para conocer sus circunstancias, sus motivaciones, sus dificultades escolares y de relación interpersonal, tanto con sus compañeros como con sus docentes, esto fue algo fundamental en mi quehacer como docente, ya que pude percatarme de aquello que demandaban en términos psicopedagógicos de la docencia.
Por supuesto que no puedo ni podía ignorar mis limitaciones pedagógicas, pero eché a andar los
recursos personales y profesionales de origen, para compensarlo. Me ha funcionado, sin embargo, siempre he adoptado la filosofía de que si vas a hacer algo, hazlo bien, así que empecé a documentarme al respecto y a tomar todo curso que se presentaba como capacitación fuera y dentro del plantel en términos pedagógicos y al mismo tiempo retroalimentándome de la experiencia basta de algunos de mis compañeros de trabajo; hasta que se presentó la oportunidad de realizar ésta especialidad.
Dentro de mi quehacer cotidiano como docente, me gusta generar en mis alumnos un interés mayor por la investigación, por adquirir el conocimiento más allá de los contenidos temáticos contemplados en el semestre. Procuro que estén atentos a los movimientos sociales para que los reflexionen críticamente y los re-incorporen como elementos significativos a sus vidas. Hago mucho énfasis en la congruencia que deben establecer entre su formación formal y la informal, mediándolos con sus valores familiares, pero a la vez cuestionándolos y colaborando para que los re-estructuren de ser necesarios. Procuro hacer la clase dinámica, divertida y amena, incorporando las TIC y ECAS que conozco de manera frecuente y con frecuencia estoy re-pensando cómo hacerle para conseguir su atención y su interés en los contenidos a desarrollar. La planeación de las actividades a desarrollar durante el semestre cobra una inmensa relevancia en esta labor, claro está.
Paradójica y tristemente, me he encontrado con la realidad de que siempre una parte significativa de los muchachos, no les gusta mucho investigar, construir su propio conocimiento, siguen instalados en el viejo sistema educativo donde la pasividad es reina, pues realizan muchas veces sus trabajos sin mucha profundidad, algunos se limitan a “cumplir” con su tarea de una manera superficial (y si pueden hasta se copian procurando timar al docente); no aprovechan el uso de las TIC o en muchos casos no saben usarla o la utilizan de manera inapropiada para otros fines no educativos.
Así mismo, me he percatado que presentan muchas deficiencias ortográficas, de sintaxis, dificultades de análisis y síntesis, de relación de conceptos y otro tipo de operaciones mentales más complejas; sus recursos pedagógicos en las exposiciones son muy limitados, bueno, hasta hay quienes presentan dificultades con la lectura y ya ni se diga de la utilización del pensamiento lógico-matemático. Esto ha sido bastante frustrante y ha dificultado mi labor como docente de manera importante. Esto es una expresión clara de nuestra “calidad educativa” hoy, y del por qué tenemos que esforzarnos y comprometernos con ser mejores docentes cada día. Existe también un factor muy importante que se presenta con mucha incidencia y claridad y al que tal vez ahora prestamos más atención o no, ya que depende de la cuestión tutorial, y e sla relación existente entre desempeño escolar y psicopatología (entiéndase depresión, ansiedad, déficit de atención, violencia intrafamiliar, abusos sexuales etc.), pero de ello tal vez podamos comentarlo más adelante.
Claro, también identifico momentos o situaciones muy gratificantes en alumnos muy comprometidos con su formación, que son muy dedicados y se esfuerzan al máximo, que no presentan dificultades significativas para el desarrollo de su formación y que valoran la oportunidad de aprender, de formarse para la vida y para el trabajo. Igual de gratificante resulta cuando algún alumno ha llegado a referir que incorpora nuevos conocimientos y que los relaciona o los articula con la vida cotidiana y agradeciendo por ello, o bien el hecho de que te comenten que les gusta la clase, que se les hace interesante y que lo refrendan con la asistencia y la participación activa. Van, te buscan, y hasta te piden los asesores en otras áreas y con otras situaciones, ya sean de índole académicas, administrativas o personales.
Un saludo. Hasta pronto.
Los saberes de mis estudiantes
Las TIC han propiciado el acercamiento generacional, revolucionado nuestras vidas. Ya no es posible seguir justificándonos y escondiéndonos tras el discurso de la brecha generacional, en ningún ámbito, y menos, en el educativo.
Es sorprendente todo lo que nuestros estudiantes realizan con ello. Es de casi todos conocido, unos más otros menos, que los jóvenes hacen uso de la internet para bajar y compartir su música predilecta, chatear o tener videoconferencias con amigos y familiares, subir fotos a espacios como metroflog o intercambian fotos con amigos y familiares, navegan por la red en busca de información para realizar sus actividades académicas, descargan software para mantener actualizadas sus Pc en el caso de los antivirus y paquetería, u obtienen herramientas que den a sus máquinas mayor rendimiento y plus informático, utilizan el correo electrónico para comunicarse entre ellos y con sus familiares, utilizan el mismo medio para mandar sus tareas escolares a los docentes que así lo solicitan, etc.
Otros, con mayores habilidades informáticas crean sus propios blogs y hasta páginas web, compran y venden artículos en páginas como mercado libre, son capaces de obtener asistencia técnica cuando se desconfigura su modem para navegar por la red, acceden a páginas con contenido pornográfico para intentar satisfacer su curiosidad sexual, juegan en línea en sitios específicos, sea de manera individual o colectiva, ven videos de toda clase o suben los creados por ellos, practican el bullyng, intercambian PPS, intentan hackear cuentas de correo electrónicos que no son los suyos, navegan por la red buscando novedades en diversas áreas tecnocientíficas, acceden a los espacios informativos para mantenerse actualizados sobre lo que ocurre a nivel mundial, disfrutan de trasmisiones en vivo de su deporte o programa favorito favorito, escuchan la radio on line, practican el inglés y otros idiomas, en fin, es notorio el uso tan diverso que le dan a la internet.
En este sentido, lo más común para aprovechar estos y otros saberes de mis estudiantes, es que realicen investigación asociada a contenidos académicos programados y específicos; se les solicita obtengan información a través de diversos servidores y distintas páginas web, con la idea de que obtengan una gran cantidad de información, tanto útil como relevante, para iniciar juntos la autoconstrucción del conocimiento.
De la misma manera, se fomenta realicen exposiciones por equipos o de manera individual, utilizando la paquetería de la que disponen, de forma que practiquen y desarrollen habilidades informáticas cada vez más complejas, agregando con ello a su trabajo académico calidad e innovación.
El uso del correo electrónico, ha favorecido el contar con un portafolio de evidencias más estructurado y organizado, para posteriormente contribuir a una evaluación sumatoria final. Últimamente, como producto de la participación en esta especialidad, la adaptación y aplicación de algunas Web Quest, ha resultado una herramienta por demás útil e interesante para todos, que nos permite romper con la monotonía académica y generar en ellos un saber de manera más dinámica y divertida.
Hasta ahora sólo ha sido la adaptación y aplicación de las web quest existentes, en un futuro, se encuentra la intención de generar las propias con la ayuda de todos nuestros estudiantes y compañeros docentes, sea como producto en el aula o trabajo de academia, pues me permito compartirles que pronto esto será una realidad en mi plantel, debido a la inquietud, entusiasmo y proactividad de compañeros que realizaron un proyecto sobre diseño y aplicación de las mismas en nuestro plantel, ya aprobado por la DGCyTM.
Quién enseñará a quién, qué se les enseñará, dónde lo harán? Desde mi punto de vista, todos aprendemos de todos y se parende en cualquier lado, en cualquier momento y bajo diversas circunstancias.
En mi caso, he desarrollado con el paso del tiempo y poco a poco, habilidades informáticas bastante útiles ahora en el plano de la docencia, pues he podido trasmitir de una u otra manera a los jóvenes estudiantes los saberes con los que cuento, por supuesto que también he aprendido de ellos mucho, por lo que, quién enseñará a quién?, Me parece es mutuo. Hace mucho que la posición omnisciente del docente ha quedado atrás.
Considero que nada de lo que enseñamos es suficiente, siempre hay más que aprender, pero sin duda, nuestra labor docente - siempre lo he sostenido -, es más que enseñar números y letras, hay mucho más que trasmitir, sobre todo en lo que respecta a la cuestión actitudinal y de valores se refiere. Dotarlos de un saber situado en un contexto significativo, en y para la vida, me parece que es una cuestión esencial en nuestra labor formativa, así como no soslayar la importancia de obtener sujetos críticos y reflexivos que colaboren a la dinámica y crecimiento nacional.
Dónde hacerlo? Creo que no sólo es en la escuela, es en nuestras casas, en la cotidianeidad de la familia, de la comunidad, de la sociedad en su conjunto donde se debe formar al muchacho. El aula, sin duda, también es un buen espacio. Por fortuna cada vez más se cuenta con escuelas mucho mejor equipadas, en algunos casos con tecnología de punta e infraestructura adecuada, como lo es el caso de mi plantel, donde se cuentan con buenos laboratorios para desarrollar las diferentes actividades académicas, entre ellos, un laboratorio de cómputo suficiente para cumplir con los objetivos a los que me he referido en esta ocasión. Qué puedo más decir? Cuando al compartir experiencias y situaciones de la docencia con otros compañeros de distintos planteles y subsistemas, hay ocasiones que refieren no contar con lo que por fortuna mi labor docente sí, en términos de infraestructura.
Un último comentario: La docencia es en mucho actitudinal y axiológica, pues existe mucha gente por desgracia, que lejos de favorecer el pleno desarrollo de los estudiantes, lo obstaculizan o lo dañan, y se presentan y se ven a sí mismos como avatares de la docencia.